Lombardi -se lo dije el otro día al conocerlo- tiene algo de Lugones. La facha, al menos. Y que es poeta. No es poco.
Mas si a ello se agrega esta prédica -jerárquica, autoritaria, aristocrática-
más se acerca a Lugones, al último, al bueno, al que dijo que era “la hora de
la espada”.
Y lo era.
¿Lo es?
BRUNO ACOSTA
Por
LOMBARDI
En relación al título, definiría lo siguiente como una crítica constructiva y la justificación de una Teoría.
Para
empezar, presentaría que el Sufragio Universal no es una cosa sola, íntima a la
Democracia como sistema, sino que una de las estrategias y perversiones por la
que este sistema se valida. Podríamos decir que al Sufragio Universal bajo un
sistema Teocrático le es factible una reorganización de su función en lugar de
una deconstrucción de sus bases filosóficas, debido a que nos relaciona con el
Racionalismo y el Empirismo, que sí son esenciales para el funcionamiento de
cualquier régimen.
En
consecuente aclaración y argumentación de lo dicho, el Sufragio Universal no es
más que una utilización estratégica de la Estadística en función al régimen democrático.
En virtud a lo dicho, una corriente de pensamiento que valide un régimen
Jerárquico y anti relativista, por esencia, se opondría a semejante idea, por
ello, lo más lógico sería una discrepancia intelectual a sus bases que lleve a
la eliminación y marginalización de dicho elemento en su totalidad.
Siguiendo
esta lógica, un posible peligro de despojar al aparato estatal de la Estadística,
principalmente en lo electoral, incluso en un Estado autoritario, donde las
decisiones democráticas son algo que se manifiestan de una manera más
Jerárquica y Elitista, a diferencia de un pueblo votando irracionalmente a
causa de sus subjetividades, séase votaciones parlamentarias del partido o
decisiones internas entre ministros, en cualquier sistema sea este o no, quitar
el empirismo numérico podría desbordarse hacia un efecto negativo. El número y
la Estadística surge del método científico y del Empirismo. Ambos fueron
fundamentales para combatir ideas erróneas que se tenían en la antigüedad,
principalmente en lo relacionado a la salud y lo científico. La Edad Media se
caracteriza mucho por sufrir crisis biológicas y estancamientos en el avance
científico. Más allá del Racionalismo y el Empirismo viniendo a solucionar
estos errores, en un contexto contemporáneo, la Estadística sí es importante
incluso dentro de la política más allá de que dicho régimen elimine el Sufragio
Universal; el mismo debería tomar el aspecto sano del mismo. Debido a que con
análisis y resultados nacidos del número y las subjetividades poblacionales, se
puede deducir realidades socioculturales claves en lo relacionado al
mantenimiento de dicho régimen, sea democrático, teocrático, o el que sea.
Por
ejemplo, en el caso de Estados Unidos, aunque perfectamente puede ser Argentina
o Uruguay, o cualquier país que comparta la misma realidad social de Occidente,
es posible gracias al análisis cuantitativo darse cuenta que si únicamente
cierto grupo demográfico votara (género, raza, etc.), cierta inclinación
ideológica triunfaría vehementemente en comparación a otra. Es decir, el
aspecto “numerolátrico” y “cuentofrénico”, muy bien argumentados por el Dr.
Caponnetto en su libro "La Perversión Democrática", aunque
detrimental cuando es utilizado como sistema electoral, es beneficioso para el
entendimiento del Estado sobre las inclinaciones morales y nivel cognitivo de
su población.
Por
lo tanto, podríamos decir que el Sufragio Universal, más que una pieza
inherente al funcionamiento de la Democracia, es también, la perversión de una
herramienta sociológica importante al funcionamiento del Estado,
convertida en una pieza del sistema que valida al régimen democrático. Dicha
herramienta no debería ser víctima de una descualificación de su efecto a causa
de su asociación a un sistema enemigo a nuestros principios, sino reinterpretada
para una función mucho más eficiente dentro del Estado Teocrático, donde dicha
información recolectada por entes burocráticos no se limite a un conteo de
decisiones subjetivas a favor o en contra de cierta candidatura, sino aplicar
un nuevo modelo de relevamiento popular, donde el pueblo es consultado ante
leyes únicamente de orden material, a diferencia de la cúpula de dirigencia
estatal, que bajo un sistema de renovación inspirado en el cónclave papal, el
relevamiento y el voto sería exclusivamente reservado para sus miembros sin
intervención de la clase no-dirigente.
¡Excelente!
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