Por Don Luis Alfredo Andregnette Capurro. Publicado en
“Cabildo”, abril-mayo de 2008.
En este aquí y en este ahora, el último Cesar de Italia, Benito Mussolini, nos llega por el camino del sentimiento. Y lo hace cuando el próximo 29 de julio se cumplan 125 años de su natalicio y el 28, de estos días de abril que se desgranan, 63 de su vil asesinato. Violento tránsito hacia la inmortalidad porque, como el primer César –el que no llegó a Augusto-, también encontró en su camino a los Grandis, Cianos y Badoglios, Brutos parricidas que ya peinaban canas de políticos.