jueves, 26 de octubre de 2023

LOS CATÓLICOS EN DEMOCRACIA


Por DARDO JUAN CALDERÓN

En grandes predios, para mantener la cohesión y mansedumbre del ganado, cada tanto es necesario reunirlo y hacerlo pasar por los corrales y mangas formando ordenadas filas, dejarlos un rato allí,  tirarles algún tentempié para que guarden un buen recuerdo y que luego de volver a experimentar la intemperie, vuelvan mansos al llamado. De esta manera no cuesta tanto la recogida cuando hace falta cargar para la faena.

domingo, 22 de octubre de 2023

EL MUCHACHO DE LOS CUERNITOS

Es el muchacho tras el que se agolpan algunos católicos argentinos, proverbial y secularmente confundidos. El muchacho de los “cuernitos”.

Inequívoco el gesto al momento del acto de depositar el papelito en la urna –cuyo más noble destino, diría José Antonio, es el ser rotas- El gesto de los “cuernitos”.

Es clara –consciente o no- la alusión al demonio. Es patente. Es cristalina. Fruto de la espontaneidad o no, refleja transparentemente que este sujeto no es, precisamente, un adalid de las huestes celestiales. Ni un “mal menor”, sino un mal redondeado.

El muchacho de los “cuernitos”. Si hacía falta una última prueba –grotesca prueba, gráfica prueba- de la confusión de los católicos y de la diabólica ascendencia de Milei, es esta.

La foto da vueltas al mundo: el muchacho de los “cuernitos”. Y el de algunos católicos, hueros de doctrina y, sobre todo, de sentido común.

BRUNO ACOSTA

viernes, 20 de octubre de 2023

¡GRACIAS, ESPAÑA!


Por BRUNO ACOSTA

En estos días de octubre se cumple un nuevo aniversario del Descubrimiento y la Conquista de América. Descubrimiento de algo que estaba, justamente, cubierto a los ojos de las naciones avanzadas del mundo; conquista para la civilización de aquellos pueblos –los indígenas- que estaban presos de la barbarie.

miércoles, 4 de octubre de 2023

LIBERTAD, LIBERTAD, LIBERTAD…


Por DARDO JUAN CALDERÓN

Es una libertad descorazonada y acobardada que se traduce por “confort”  para vivir y olvidarse no sólo de la muerte, sino también de vivir de verdad. Para que la pérdida de todo se haga mientras estoy en la piscina, o mientras pruebo la cocina extranjera viajando en clase turista, mientras me solazo aspirando el ambiente dulzón de los pedos del diablo.

Generaciones de argentinos han sido educados cantando un himno que gritaba tres veces ¡libertad! y esto les dio la idea de que hasta 1810 habían sido esclavos. Por lo que, rotas las cadenas de la esclavitud,  había que conservar la gloria de ser libres y cumplir el deber de conservar  esos laureles ¡que supimos conseguir!